El gobernador de Mendoza analizó la situación actual del país, lo que puede deparar para el futuro y la posición de Mendoza en el eje del poder.
Un año ajetreado termina para iniciar otro en busca de soluciones, pero con un destino incierto. El presidente de la República Argentina, Javier Milei, puso en marcha su plan motosierra anticipado durante su campaña electoral. El Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y el megaproyecto de la ley ómnibus, más formalmente denominado «Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos», son sus dos primeros movimientos para buscar una mejora en la economía del país sin gradualización.

Los distintos gobiernos provinciales se mantienen al margen de las decisiones nacionales, a la espera de lo que pueda suceder en el Congreso de la Nación. La provincia de Mendoza está más expectante que nunca y comparte la incertidumbre con el resto del país. «Hay conversaciones con el Gobierno nacional, pero no participamos en la definición de estos proyectos. Los 10 gobernadores de JxC queremos darle la derecha al Gobierno en esta primera etapa de su funcionamiento. En líneas generales, creo que hay que apoyar ambas iniciativas, tanto el DNU como el megaproyecto de la ley ómnibus«, manifestó el mandatario mendocino.
